Lo que distingue a un buen líder es el respeto a los demás

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Liderar no es algo sencillo
Estar al frente no es hacer lo que a uno le apetece en cada momento
Lo que distingue a un buen líder es el respeto a los demás

Suelo impartir charlas y ponencias sobre el tema de liderazgo y es muy frecuente que me pregunten sobre qué es lo que considero qué es liderar. Liderar, de acuerdo a la RAE, es estar la frente, ir el primero. Para ello hay que hacer muchas cosas, algunas veces hasta poco populares.

Un buen líder es aquel que hace lo que debe de hacerse, independientemente de que sea popular, complejo, sacrificado o impopular. Estar al frente no es hacer lo que a uno le apetece en cada momento. Liderar es tomar decisiones, hacerlo bien y siempre debe hacerse desde el respeto a las personas. Liderar no es sencillo, aunque lo parezca y, a pesar de que para algunos sea deseable porque consideran que eso les va a otorgar poder.

Desde aquí quiero desmitificar ese aspecto: el buen líder, muchas veces no tiene poder. De hecho, los mayores líderes positivos de la historia no lo tenían. Podemos recordar a Jesucristo, Mahatma Gandhi, la Madre Teresa de Calcuta, Martin Luther King o Nelson Mandela antes de ser presidente de Sudáfrica. No tenían poder y eran líderes. Grandes líderes. Los suyos les respetaban porque ellos respetaban a todas las personas.

El verdadero líder mantiene el máximo respeto por las personas aún cuando tiene razón y poder

Hay muchos tipos de líder y muchos tipos de liderazgo, pero, desde mi punto de vista, el verdadero líder lo es cuando a pesar de tener poder y razón, mantiene el respeto a todas las personas.

Si quieres ser respetado y ser recordado como alguien a quien merecía la pena seguir tendrás que hacer muchas cosas, algunas complejas e incluso impopulares; algunas para las que tendrás que formarte y hacer grandes sacrificios, pero sin duda, una de las esenciales es respetar y eso, amigo, es solo cuestión de querer hacerlo, está al alcance de todos nosotros.

Si quieres liderar y ser respetado, respeta a las personas aún cuando tengas razón y poder. Hacerlo es una elección personal y es lo que distingue a un buen líder de un jefe / encargado / profesor /padre / madre de familia 'chusquero', que los hay, y muchos, que no saben que en cuanto pierdan el poder (que sucederá, tarde o temprano sucederá) no tendrán autoridad alguna y serán recordados como eso, como 'chusqueros'.